Historiadora y feminista.
Su proyecto surge de la preocupación sobre el impacto ambiental y social que tienen los textiles de uso cotidiano en una sociedad dominada por el consumismo, la represión social, la censura y la violencia. Desde estas inquietudes piensa los talleres textiles, utilizando las puntadas y las telas como un soporte para la expresión social y personal.
Le da particular importancia al rescate de todo tipo de textiles y crea piezas únicas interviniéndolas con diversas técnicas como, el bordado, teñido natural, serigrafía, pintura textil y patchwork, estas piezas buscan transmitir un mensaje que pretende generar una reacción en el espectador y que puedan representar las ideas, emociones o posturas políticas.
Actualmente es tallerista y gestora de un proyecto de upcycling textil llamado Punto Lore.
Conoce más de su trabajo en:
https://www.instagram.com/punto.lore/